Si estás pensando en un cambio en el mobiliario de tu oficina, busca en las tiendas de sillas de oficina en Madrid, la que mejor se adapte a tus necesidades. El trabajo de oficina requiere permanecer sentado horas y horas. Un buen asiento hará que tu salud te lo agradezca. Por suerte, hoy día las sillas de oficina son cómodas y agradables, pero no siempre fue así. Si quieres saber cómo ha evolucionado este mueble, no dejes de leer.

Hacia mediados del siglo XIX aparecen lo que podrían considerarse como las primeras sillas de oficina. Eran de recia madera y no muy cómodas. La primera que incorporó ruedas se atribuye a la usada por el afamado biólogo Charles Darwin. El descubridor de la evolución necesitaba moverse con soltura por su despacho y le instaló unas ruedas de cama a su silla. Otros notables investigadores, como el psicólogo Sigmund Freud, llegaron a confeccionar sus propias sillas en busca de comodidad. Curioso, ¿no crees?

Con la llegada del siglo XX y el crecimiento de las compañías, surgen los primeros respaldos y asientos tapizados. Las sillas seguían siendo simples y recias, pero pronto nuevos materiales entraron en escena para poner las bases del actual mobiliario de oficina que puedes encontrar en las tiendas de sillas de oficina en Madrid. En 1925 se diseñaba la primera silla de tubos de acero. Estaba llamada a revolucionar el mercado, pues podía ser fabricada en serie y a gran escala, con la consiguiente bajada de los precios.

Sin embargo, para llegar a la ergonomía habría que esperar a la década de los 60. Las oficinas se habían consolidado y el trabajo administrativo era común. Así que las sillas se adaptaron para evitar dolores musculares o lesiones innecesarias.

Como ves, las sillas de oficina han evolucionado hacia la búsqueda de la comodidad y lo seguirán haciendo. Desde Persiman te animamos a contactarnos. Somos especialistas en todo tipo de muebles de oficina.